martes, septiembre 12, 2017

Cotidianidades (IV)

Anécdota cotidiana:

Salgo de clase y viajo en el metro. Somos mil pero la mayoría viaja sólo. Al llegar a la estación camino rumbo a unas escaleras. Entonces la escucho. Una madre que le dice a su niña:

+ No te preocupes, para ir a Urano tendríamos que ser astronautas, y ninguno de los que va en este metro es astronauta.

Yo me sonrío. Pienso. Espero. Es un impulso. No la conozco. No sé de qué hablaban. Una idea que crece hasta que las palabras salen solas de mi boca. Decido controlarme pero ya es muy tarde.

- Todos somos astronautas en realidad, digo.

+ ¿Tu eres astronauta? porque nosotros no somos, dice la madre

- Si, también lo son. Estamos en el mejor viaje espacial del mundo. La nave en la que viajamos es el planeta entero. Recorremos el espacio a miles de kilómetros por hora. Nosotros somos los astronautas, esta nuestra nave y ese es nuestro viaje.

Ella me mira y se sonríe.

+ Si, visto así, somos astronautas también.

Yo sigo bajando las escaleras. Ella también. Llegamos al primer piso. Los tres sonreímos. Yo sigo mi camino. Ellas el suyo.

Astronautas todos.